Riesgo de suicidio: urge actuar
El suicidio es un problema de salud pública de primer orden que que no para de aumentar. ¿Qué relación tiene con la depresión?, ¿cómo saber si alguien está en riesgo?, ¿es posible prevenirlo? En el Día Mundial para la Prevención del Suicidio contestamos a estas y otras preguntas.

El suicidio causa 700.000 mil muertes anuales
El suicidio es una realidad durísima que no entiende de edades, sexo o situación socioeconómica. Según la Organización Mundial de la Salud cerca de 700.000 personas en el mundo se suicidan cada año: 1 de cada 100 muertes es por suicidio.
7 de cada 10 personas que se suicidan son hombres
El suicidio es la primera causa de muerte externa en nuestro país, también entre los jóvenes de 15 a 29 años, por delante de los accidentes de tráfico.
Según los datos provisionales de la Estadística de defunciones por causa de muerte del INE, en el año 2023 se suicidaron 3.952 personas, lo que supone un descenso del 6,5% sobre el año 2022. Sigue siendo al principal causa de muerte externa entre los hombres.
Factores de riesgo de suicidio
El suicidio es una realidad extremadamente compleja y grave ocasionada por múltiples causas. Cuando una persona ha cometido un intento de suicidio, ha recorrido un largo camino de sufrimiento y desesperanza en el que se acerca a esa posibilidad poco a poco.
- Muy a menudo está vinculado con alguna enfermedad mental grave como depresión o consumo de sustancias. Es en estos casos cuando hay que estar vigilante ante las posibles señales de ideación suicida (“coqueteos” con la idea de suicidarse).
- También puede suceder como una reacción impulsiva ante situaciones difíciles o dolorosas (pérdida de empleo, fallecimiento de un familiar, diagnóstico de una enfermedad grave, etc.).
¿Cuál es la relación entre depresión y suicidio?
La depresión es el trastorno mental que más se asocia con el comportamiento suicida (tanto los intentos de suicidio como la ideacion suicida). Es uno de sus principales riesgos. especialmente en casos de depresión mayor o persistente.
Para estas personas, el suicidio suele actuar como un escape: un medio para salir de su situación. No se trata de un acto cobarde, sino de la última opción ante una existencia llena de sufrimiento, desesperanza, vacía, o triste de la que perciben que no pueden salir de otro modo. Es un camino que recorren gradualmente. Por eso cualquier comportamiento suicida es relevante, y siempre, por mínimo que parezca, hay que prestarle la debida atención y acudir a un profesional de la salud mental.
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Cómo saber si alguien si está en riesgo de suicidio
Puede haber situaciones muy distintas, pero hay indicios de que una persona puede estar en riesgo de suicidio:- Escribe o habla sobre la muerte y el suicidio, de la carga que supone para sus allegados o como un medio para poner fin a su sufrimiento.
- Resuelve asuntos pendientes o cuestiones legales como tutelas, testamento, etc., o comienza a despedirse de sus seres queridos, les regala objetos preciados, da indicaciones sobre el futuro...
- Se aísla de su entorno, pierde interés por actividades placenteras, está desmotivado y desesperanzado.
- Comienza a asumir comportamientos de riesgo al conducir, consumiendo alcohol u otras sustancias en exceso, etc.
- Muestra una falta de higiene personal y tiene problemas de sueño y alimentación.
- Los intentos de suicidio previos son uno de los principales factores de riesgo.
¿Cómo actuar ante el riesgo de suicidio?
De entrada, toma en serio cualquier manifestación de suicidio, aunque parezca una mera manipulación o un reto. Cualquier "aviso” puede tener un desenlace fatal.
- Recurre inmediatamente a un profesional de la salud que te oriente y apoye.
- Retira todos los medios que pueda utilizar para poner fin a su vida: medicación, pesticidas, plaguicidas o productos de limpieza, cuchillas u otros objetos cortantes, armas de fuego, etc.
- Muéstrate disponible y dispuesto a apoyar y hablar con tu ser querido sobre lo que está viviendo, pero sin juzgarle, castigarle ni minimizar su sufrimiento.
- No prometas confidencialidad, pero anímale a buscar apoyo juntos.
- En caso de que no lo tengas ya, desarrolla un “plan de seguridad” (mejor si lo hacéis juntos): cómo, cuándo y quién acompañará, qué hacer en caso de emergencia o tentativa de suicidio, etc.